Como te mencionamos, el huevo, a pesar de ser un alimento básico, es muy completo. En el huevo se encuentran cantidades abundantes de minerales como el fósforo, selenio, hierro, yodo y zinc; entre las vitaminas se destacan la D, E y A, y las del grupo B (B12, B2, B1 y B6). De igual forma, se pueden encontrar en este alimento propiedades antioxidantes por su riqueza en fosfolípidos, lecitinas y carotenoides como la zeaxantina y luteína, componentes antioxidantes que intervienen en la salud visual.
A pesar de que por sí solo aporta grandes nutrientes, es posible hacerlo aún más poderoso y beneficioso para la salud. Precisamente, una de las grandes ventajas de la constante innovación que llevamos a cabo en Santa Anita es la producción de alimentos enriquecidos en su composición nutricional. Los avances en investigación en nutrición animal han demostrado que efectivamente una gallina mejor alimentada o aquella que recibe más y mejores nutrientes, puede producir huevos diferentes.
De esta manera, pensando en tu salud y la de tu familia, nuestros huevos enriquecidos con Omega 3 y Vitamina E son producidos por un selecto grupo de gallinas con una alimentación especial. Logrando que pongan huevos con hasta 30 veces más omega-3 que otros huevos de gallina comunes. *https://fdc.nal.usda.gov/fdc-app.html#/food-details/748967/nutrients
Ahora bien, ¿por qué es importante este componente? Los ácidos grasos Omega 3 son ácidos grasos poliinsaturados esenciales, es decir, se requieren ingerir por la dieta, ya que el organismo no los sintetiza, y aportan grandes y diversos beneficios, entre ellos:
- Durante la gestación son componentes estructurales del cerebro y de la retina durante el desarrollo del feto.
- Para el crecimiento, en niños amamantados o alimentados con fórmulas que contienen DHA se ha observado una mejor habilidad cognitiva para integrar información y un mejor coeficiente intelectual. Además, son esenciales para un crecimiento y desarrollo normal.
- En cuanto al sistema cardiovascular tienen efectos antitrómbicos y antiarrítmicos, previenen la aterosclerosis al reducir las concentraciones de colesterol en plasma, contribuyen a bajar la presión sanguínea, reducen la concentración de triglicéridos en plasma y disminuyen el colesterol total.
- También influyen mucho en el sistema nervioso. Son esenciales para un adecuado desarrollo y funcionamiento del cerebro y de este sistema en general. Tienen la capacidad de corregir problemas visuales y cerebrales en pacientes con deficiencia demostrada. Son precursores de compuestos hormonales como los prostanoides (prostaglandinas y tromboxanos) que facilitan la transmisión de mensajes en el sistema nervioso central. Cuando existen niveles adecuados de DHA en el cerebro, se mejora la actividad cerebral. Están relacionados con problemas de depresión y violencia, se ha demostrado que el DHA dietario tiene efectos protectores contra un aumento en la hostilidad en estudiantes bajo condiciones de estrés.
- Hay otras enfermedades sobre las cuales los ácidos grasos Omega 3 tienen efectos benéficos, entre ellas diabetes tipo 2, cáncer, colitis ulcerativa, enfermedad de Crohn, obstrucción pulmonar crónica, enfermedades renales, psoriasis, artritis reumatoide. *http://ve.scielo.org/scielo.php?script=sci_arttext&pid=S0378-18442002000300005&lng=es&tlng=es.
Fuentes: Castro-González, María Isabel. (2002). Acidos grasos omega-3: beneficios y fuentes. Interciencia, 27(3), 128-136. Recuperado en 29 de marzo de 2023, de http://ve.scielo.org/scielo.php?script=sci_arttext&pid=S0378-18442002000300005&lng=es&tlng=es.